He conocido gracias a José Manuel Goig Campoy esta Interesante entrevista a Julio Anguita de la que me comentaba Helena Meler que «… La lucha total, sin resultados inmediatos, por pequeños que sean, se abandona a la de tres… creo que debería ir acompañada de iniciativas que nos independicen de sus estrategias de paralizarnos y manipularnos. Siendo independientes, somos mas fuertes»
El problema de «la lucha total» es que no puede ser abordada parcialmente, salvo si esa parcialidad forma parte de un plan común.
El gobierno si cuenta con un plan común propio, elaborado con las fuerzas que guían la política de recortes. Este plan afecta a todos los aspectos de nuestra vida. No nos gusta porque es antisocial, destruye nuestra realidad y nuestras capacidades, en el esquema de funcionamiento de la sociedad que conocíamos, y crea las bases aún borrosas de una sociedad regresiva, inhumana, insolidaria, insostenible y totalitaria.
Si queremos superar esta situación no nos queda mas remedio que crear nuestro propio plan basado en el Bien Común y hacerlo de forma que nuestras «parcialidades» lo enriquezcan creando las bases de una sociedad progresiva, humana solidaria, sostenible y democrática.
Este momento de «parón» se puede vivir subjetivamente como derrota cuando es en realidad una gran oportunidad para elaborar los fundamentos de ese plan, cosa que hasta ahora no nos ha permitido hacer el permanente estado de movilización.
Así como es necesario un Proceso Constituyente que vertebre al conjunto de la sociedad alrededor de un plan político de cambios legales, económicos y sociales, necesitamos un plan estratégico con basamento científico para este en el que el trabajo sea fundamentalmente intelectual e interdisciplinario.
Para conformar este plan común debemos movernos en todos estos ámbitos, incluido el político.
RT @jivagos: La batalla es total pero aún no actuamos en coherencia: http://t.co/smAGqLhJqx
José Manuel Castillo Amigo liked this on Facebook.