Netocracia, hackers informáticos y sociales

Nos cuenta neocoach en «Las conversaciones linux» que

«Cómo ya hemos visto en el itinerario, el libro «La ética hacker y el espíritu de la era de la información» de Pekka Himmanen, ofrece un panorama general acerca de los valores de la ética del hacker.Estos son observados en comunidades de los programadores de linux, aunque, cómo bien dice el autor, estos valores se empiezan a extender hacia otros ámbitos en esta era en que lo digital lo inunda todo, conformando lentamente una floreciente netocracia.»

El mundo Linux es muy atractivo entre el activismo social porque es una construcción colectiva donde no hay puertas cerradas.  Sin embargo hay diferencias muy importantes entre la construcción social y el desarrollo en el mundo linux; la diferencia más importante es que los programadores comparten no solo el lenguaje y la metodología sino sobre todo los objetivos.

Quienes participan en el desarrollo de una aplicación comparten las funcionalidades que quieren obtener, el interfaz de usuario…. comparten también cada nuevo objetivo en los cambios de versiones. Tienen planificación en el trabajo, en los medios…

El hacker es un individuo dinámico en estas comunidades, un constructor aguerrido tan implicado en su comunidad, en sus recursos, en sus medios, en su dinámica que sistemáticamente la desarrolla mas, como una parte decisiva, definitoria, de su vida.

En la vida social, en todas sus facetas, desde la productiva, la científica, la asistencial o la política… desde los niveles sociales de carácter global (cambio climático) hasta la investigación bioquímica o genética, el problema es que no compartimos los objetivos.

Si dispersamos los objetivos automáticamente tenemos dispersión social y en ella todo es posible.
El hacker informático en la sociedad es un buque bien dotado, un todo terreno para hielos, barros y mares. Tiene sus objetivos, compartidos en su grupo, desconocidos en la sociedad y por tanto muchas veces incomprendido fuera de su grupo.

El hacker social, el activista, es un elemento extraño en estos días, extraño por su escasez y por los fuertes dolores que le causan la inexistencia de objetivos sociales y la consecuente dispersión.

Hubo en el pasado objetivos definidos en el plano ideológico, marxismo, anarquismo y otras filosofias menos conocidas, pero les pasó como a algunos programas muy bien pensados y desarrollados que no interesan a nadie o que puestos en batalla no funcionan. Esto no degrada sus objetivos y quizás si diga mucho de los medios que se usaron, de los planes de implementación y participación social… hay un mundo para hablar ahi.

Es posible sin embargo definir objetivos sociales, definir los medios, los procedimientos y redefinir en el camino los objetivos trazados en el inicio, para esto es muy importante encontrar el nivel del acuerdo posible  y el grupo en el que es posible un acuerdo social capaz de movilizarse.

Me gustó la idea del Itineraio porque Las Indias es un ámbito de acuerdo posible con un alcance mas allá del mundo linux. Digamos que un encuentro del hacker social con el hácker informático.

Pero volvamos al ámbito global aparentemente descartado por mi texto, el del acuerdo ideológico global, porque tenemos recursos de lujo que los hackers informáticos proveen con toda clase de posibilidades para que los hackers sociales rompan la maldición que los está extinguiendo.

Tenemos como un claro ejemplo la Wikipedia que está generando conceptos globalmente aceptados no solo por la cientificidad de sus contenidos sino porque son también el resultado de una intervención social. Si pasamos el otro lado de esta fusión entre el hacker informático y el social encontraremos movimientos sociales globales, como el conocido movimiento antiglobalización imposible sin internet.
Se está formando una conciencia global a trompicones y de momento a la deriva. Quizas algunas islas hacker, los netocratas de neocoach , por método, procedimiento, desarrollo y objetivos, nos eviten algunos golpes en el camino.