Está el PP eufórico con el apoyo social que le dan las encuestas por su actitud en el Caso de De Juana Chaos y por la movilización de sus fieles en la calle con este asunto.
No puedo porponer verlo friamente con los ánimos tan caldeados, pero yo por y para quien lo quiera leer si lo voy a hacer.
De Juana cumplió condena por 25 asesinatos, salió y se dedicó a escribir. Quienes ahora dicen que no debió salir vivo de la carcel enarbolan esos asesinatos y su pertenencia ETA como argumentos decisivos contra la decisión de otorgar el segundo grado, decisión que le permitiría pasar el resto de su condena en regimen de vigilancia domiciliaria.
Pero su condena no es por asesinato, ni por pertenencia banda armada, sino por amenazas. Hay que repetirlo en mayusculas pues nadie quiere saber nada de eso, está condenado por AMENAZAS, algo muy común en nuestra sociedad y por lo que pocas veces se encarcela a nadie.
No entro a valorar la cuantia de la condena, pero si el ambiente que la ha envuelto porque solo por ser el tema estrella del PP esa condena se ha convertido en objetivo de su artillería.
La huelga de hambre de De Juana Chaos ha sido precisamente por esa discriminación con respecto a condenas similares y por el ensañamiento del que ha sido objeto.
Yo no le voy a defender, cada cual que apechugue con los caminos en los que se adentre, pero no me parece bien callar y dejar hacer a la ultraderecha, si porque el PP esta actuando con esos mismos métodos.
El PP ha convertido el problema de ETA en un banderín de movilización que sirve en estos momentos para encauzar las tensiones sociales, la volencia contra el otro, contra el diferente, contra ese enemigo tan necesario para justificar la represión y la violencia.
Y esta sociedad no tiene válvulas de escape, no hay huelgas ni movilización obrera, entre los sindicatos y los radicales cambios del mercado de trabajo los trabajadores estan totalmente desorganizados y cada vez menos conscientes de esta necesidad. Tampoco hay una estructura de organizaciones sociales que permitan corregir el mercado inmobiliario o la defensa de la naturaleza u otros, tampoco hay organizaciones políticas capaces de organizar ni representar otras voluntades, lo institucional sigue como siempre de espaldas a la población.
Lo que no se expresa conscientemente sale de otras formas del subconsciente y el odio al otro es una forma sencilla y fácilmente manejable, ha sido por eso el caldo ideal para el cultivo del fascismo.
Pero así como las ausencias facilitan ese camino tambien hay que decir que estan ausentes las fuerzas contrarestantes. Por supuesto el impulsor no será nunca una de ellas, tiene en sus filas y en su directiva fieles partidarios de ese camino.
Pero tampoco el PSOE y el gobierno que lejos de caminar en otro sentido van a la zaga de todo lo que haga o diga el PP, define o modela sus posiciones según lo que haga diga o manipule su adversario y asi sus posibles ayudas contra esa deriva se van yendo.
Nadie que haya votado al PSOE o que no lo haya hecho desde su lado izquierdo, se va a preocupar por convencer a las huestes del PP que son lo que son y han sido siempre.
De esta forma la única movilización que se produce son las huestes radicales de la derecha, dicho en facil, los ultras.
Como dice mi buen amigo en A este lado del rubicón ¡hay que salir a tapar la calle!