La asociación Ágora de Getafe estuvo ayer hasta los topes.
Cien personas, muchas de ellas conocidas por su actividad de compromiso social y político, nos reunimos empujados por la emergencia social para hablar de la posibilidad de hacer como en otros municipios y ciudades: organizar un proceso de empoderamiento que devuelva la voz y el poder de decisión a los ciudadan@s de Getafe.
Con turnos de palabra, muy rápidos por el escaso tiempo, conseguimos ponernos de acuerdo en el reto y la necesidad para todos de construir un camino juntos al que podamos incorporarnos sin que el peso del pasado, la mochila que todos llevamos en palabras de uno de los oradores, no nos impida colaborar.
Un camino que tiene una cita con las instituciones, que tendrá si lo conseguimos candidatura, pero seguirá vivo después de la cita electoral si no queremos que los poderes de siempre bloqueen la iniciativa popular.
Presentó la asamblea Andrés en nombre de Asamblea Ciudadana, la organización convocante, tras cuya intervención entregó el protagonismo a los presentes quienes andamos los primeros pasos de un proyecto que solo puede ser común.
Quedó un grupo de trabajo hasta la siguiente asamblea que será el día 25 de octubre por la mañana. Este asegurará un sitio mas grande y unos temas de inicio que ya se acordaron en la asamblea se tratarán en ella como el método de toma de decisiones, la organización del plan de trabajo, o la posible elección del nombre para la iniciativa.
Puede llamar la atención que el primer día no salieran mas cosas, pero es normal que sea así. Es complicado tomar acuerdos en un entorno tan plural, colaborar costará al principio, un «estado de desconexión» que también tenemos entre los vecinos, tan plurales como poco acostumbrados a decidir en aquello que les correspondería por ley de vida, sus asuntos comunes.
En el camino para ganar las instituciones, hacer candidaturas, firmar compromisos éticos, llevar a cabo programas y muchos otros proyectos que nos empujaron a reunirnos por el bien común, tendremos que aprender a colaborar y beneficiarnos de aquello que parece nos aleja.
Nuestras diferencias son una gran riqueza para nuestra inteligencia colectiva y en ella debemos apoyarnos para cambiar la forma de hacer política, para que seamos los ciudadanos y no corruptos o carreristas, quienes decidamos.
Lo mas valioso de ayer es que hubo acuerdo en iniciar este camino. Debemos alegrarnos por ello, es en si mismo todo un hito.